Yoga 101: ¿Cuáles posturas de Yoga debo evitar en el embarazo?

El Yoga Prenatal tiene muchos beneficios y te ayuda a prepararte física y mentalmente para el tipo de parto que decidas tener. Durante esta etapa debemos tomar en cuenta ciertas recomendaciones para aprovechar nuestra práctica al máximo. ¿Cuáles son las posturas que debemos evitar y qué modificaciones debemos hacer? En las siguientes líneas te lo cuento.

Primero, vayamos a unas indicaciones que son importantes mencionar:

Toda práctica de Yoga Prenatal debe ser autorizada por un médico. Yoga Prenatal no es recomendable en los siguientes casos:

- Amenaza de aborto

- Preclampsia

- Antecedentes de pérdidas

No se deben practicar estilos como Yin Yoga y Hot Yoga. En Yin Yoga, se permanece durante bastante tiempo en las posturas (de 3 a 5 minutos). En el embarazo se produce la hormona relaxina en altas cantidades, lo cual hace que se relajen los músculos y la práctica de este estilo puede causar lesiones por sobre estiramiento. 

En cuanto al Hot Yoga, este puede causar contracciones prematuras y deshidratación, por eso es que debe evitarse.

Ahora, pasemos al tema central de este post: ¿Cuáles posturas debemos evitar practicar durante el embarazo? 

Inversiones:

Las posturas como paradas de manos, de antebrazos y la vela no son recomendadas en lo absoluto ya que en estas usamos la fuerza de toda la zona abdominal (también conocida como core). Durante el embarazo esta se va al abdomen, por lo cual no tendrás la estabilidad que esta te brinda (por más que tengas una práctica fuerte y constante).  La práctica de inversiones puede causar náuseas y mareos, por eso es mejor evitarla. Lamentablemente, he conocido casos de mujeres que las practicaron durante el embarazo y terminaron con una cesárea de emergencia. 

Backbends:

La práctica de Backbends (también conocida como arcos) puede causar mareos y dolor de cabeza. Estas posturas son el camello, la rueda, el pez y la cobra. 

Balances de brazos:

En los balances de brazos la fuerza también promueve del abdomen y no de los brazos, como comúnmente se cree. Por eso es mejor evitar posturas como el cuervo (alto, bajo y lateral) para así evitar que el/la bebé se sientan incómodos. 

Posturas boca abajo: 

Este tipo de posturas no debemos practicarlas porque generamos presión en la barriga y ponemos peso sobre ella. 

Es por esto que si estás embarazada, te recomiendo asistir a clases de Yoga Prenatal, ya que la práctica estará enfocada en las necesidades de tu bebé y en las tuyas.  Te aseguro que te sentirás cómoda, feliz y disfrutarás esta etapa al máximo. 

Si quieres clases particulares de Yoga Prenatal conmigo contáctame aquí. 

Si practicaste Yoga Prenatal durante el embarazo, ¡cuéntame tu experiencia en los comentarios!

NAMASTE
Jimena